Tu aliento hechiza el aire que envuelve cada suspiro enrarecido del amor,
Y tu cabello cuelga como finos rayos de sol de hilillos negros seda,
Se esparce ilumina mi rostro ese rose al tacto desata una sonrisa de luz.
Cada beso loco, cada beso absuelto,
Y los dos eclipses de tus ojos son mis noches dormidas de hadas,
Al mirarte me pierdo en esa dimensión desconocida del misterio.
Corazón el dolor no será mentor de nuestras tristezas villanas,
Asechemos con cada fusión de cuerpo y aislémonos de cada desdicha pasada,
Los instintos de nuestra naturaleza serán guías en esa búsqueda larga,
No temas amar en carne, no huyas a tu éxtasis de amor, separa la mente del cuerpo,
Y en el milagro de amarnos será sublime y único ese instante plagado de estrellas
Difuminadas en ese lapso eterno de pasión.
No mente en los azares del amor,
Inventemos formas para desintegrarnos y que nuestra hermandad de amor
No desaparezca en los placeres del mundo…te amo
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